¿Jugamos a Rol con el MONOPOLY?

Un título llamativo para una reflexión particular. No se vosotros, pero yo me he preguntado realmente qué es un juego de rol. Interpretamos personajes mientras usamos dados, habitualmente, para resolver las situaciones de los personajes pero yo me pregunto que si lo fundamental es la interpretación, ¿podríamos jugar con otros juegos menos al uso?

La pregunta realmente no es una tontería si tenemos en cuenta los orígenes de nuestra afición. En 1975 Gary Gygax y Jeff Perren publicaron un juego llamado Chainmail. Chainmail era un complicado wargame que incluyó  reglas especiales para asaltos al castillo a nivel de guerreros y no de ejercitos, que uso un tal Dave Arneson en una partida especial para sus amigos. En esta partida de WARGAME los jugadores en lugar de ejercitos controlaban personas y tenían que cumplir la misión que les encomendo el rey elfo. Esto fue la semilla que generó D&D, sus millares de reglas alternativas, su refundición en AD&D y todos los juegos de rol.
Como dato curioso la famosa GEN CON, famosa por juegos de rol, debe su nombre a los Convenciones de Ginebra (GENEVE CONVENTIONS). En Ginebra se han firmado multitud de tratados internacionales pero los más destacados, más de nuestro interés en realidad, son los relativos a los prisioneros, heridos y víctimas civiles.
Como primer juego de rol sus mecánicas están muy centradas en el combate junto al "mazmorreo" y la interpretación de los personajes es todo lo libre o/y profunda que uno quiera o pueda además de que todo lo no sujeto a las reglas será de libre valoración por el narrador. Los juegos de rol modernos añadieron mécanicas para resolver muchas situaciones, para la interpretación y mucho transfondo para los personajes.

Evidentemente no todo juego sirve para jugar directamente al rol, la mayoría no tendrán ni siquiera un transfondo muy sólido o necesitarán fuertes modificaciones. ¿Podríamos decir que jugamos a rol si jugamos a una modificación de "Bang" para crear historias? ¿Y con el Risk? Interpretaríamos a líderes megalómanos mientras que el narrador nos modifica las capacidades de los ejercitos según nuestra interpretaciones. ¿Y al Monopoly?
Bonito tema es este. En la gran mayoría de juegos hay reglas de combate aún suponiendo que este no es el objetivo del juego. Pero no muchos tratan cosas mecánicas como el comercio, el mundo judicial, la política y otras profesiones que podrían dar lugar a muchas buenas historias. Tenemos actualmente reglas de dominar feudos en la Marca, juicios poco profundos en el suplemento de Sangre de Toro y un simulador de asistentas muy "moe" con Maid; pero nadie ha profundizado en tramas económicas a lo Spice&Wolf (por decir algo).
COMPARTIR
Icono Facebook. Compartir entrada en Facebook Icono Twitter. Compartir entrada en Twitter. Icono Whatsapp. Compartir entrada en Whatsapp

0 respuestas:

Publicar un comentario